Así como lo oyen, vamos a presentarles los peores comerciales de la televisión Mexicana. Y vaya que hubo muchos candidatos a calificar, pero dado que la programación y el nivel de cultura dejan mucho que desear en la televisión del país azteca, debemos mostrar lo que NO se debe hacer cuando se quiere promover un producto.

La Asociación Civil “La Cabaretiza”, mediante un observatorio ciudadano, buscó señalar las campañas mediáticas y publicitarias que promueven la violencia de género y para cerrar con broche de oro, “premia” a los comerciales más sexistas en diferentes categorías. Aquí los galardonados (que por cierto, ninguna empresa ha pasado a recoger):

Categoría “¿Quién crees que lava la ropa?”
Sobre productos de limpieza, el ‘ganador fue el detergente Ariel.

Categoría: “Ni aprendemos ni jugamos”
Premia artículos para niños, el anti-premio fue para Distroller.

Categoría: “Bájate por los chescos.”
Esta categoría de publicidad sobre bebidas se lo llevó Pepsi.

Categoría: “Ay qué cosita tan bonita”
Donde se señalan los anuncios donde la mujer es un objeto, hubo un triple empate entre Acapulco Shore, el nuevo programa de MTv, Axtel y Tenis Charly.

Categoría: “No me ayudes comadre”
En donde las agencias intentaron hacer algo diferente pero caen en el sexismo, el antipremio fue para Fud.

Categoría:  “Feo, fuerte y formal” 
Sobre publicidad de hombres como protagonistas, fue para Old Spice.

Categoría: “En todos lados se cuecen habas” 
Sobre publicidad internacional, fue para el anuncio de Desigual en España sobre el Día de las Madres.

Categoría: “Trayectoria”
Para las marcas que no dejan de hacer anuncios misóginos, fue para la cerveza Tecate.

Pero bueno, no todo es malo, también hubo premios para los comerciales que rompieron con las barreras del sexismo y los estereotipos:

Ganador: “I Have a Dream” 
El anuncio que logró ser diferente sin caer en el sexismo. Fue para Nescafé:

Aunque el público pedía que el ganador fuera el detergente Eficaz:

¿Qué te pareció? Interesante ¿cierto? Dicha Asociación Civil no solo pretende erradicar la violencia y tipificación de la mujer como objeto, sino también hacerlo con el hombre aunque, aceptan, es en menos proporción. Pero ¿qué opinamos nosotros? Somos conscientes de que no sólo es cuestión de las agencias, sino de nosotros los consumidores. Como sociedad debemos exigir los valores que queremos poniendo el ejemplo y obligando a las agencias a actuar acorde a nuestras reglas.

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vía: El País.